Historia de Fundamuni
FUNDAMUNI inicia labores en octubre de 1992 como Programa de Capacitación y Apoyo a Municipios de El Salvador, PROCAP, nueve meses después de la firma de los Acuerdos de Paz. Es en enero de 1994 que PROCAP se constituye como Fundación de Apoyo a Municipios de El Salvador.
La Fundación de Apoyo a Municipios de El Salvador, FUNDAMUNI, con 30 años de existencia, experta en impulsar procesos de desarrollo territorial participativos, con actores clave, población en general, organizaciones de la sociedad civil, instituciones, autoridades municipales e instancias microrregionales, promoviendo procesos de planificación estratégica, espacios de dialogo y transformación de conflictos, a fin de mejorar las condiciones de vida de los habitantes, brindando asesoría y acompañamiento para la creación y fortalecimiento organizativo, participación ciudadana, gobernanza, transparencia, prevención de la violencia, economía local, infraestructura social y económica.
Desde el inicio se dedicó a facilitar la búsqueda de entendimiento entre autoridades municipales, liderazgo y población local para llegar a acuerdos sobre las prioridades de reconstrucción y desarrollo en sus territorios
Durante los primeros tres años concentró su trabajo en capacitar, apoyar y acompañar a las Comisiones Municipales de Reconstrucción y Desarrollo (CMRDs), instancias creadas en el marco de los Acuerdos de Paz, como parte del Programa de Restablecimiento de la Administración Pública que fue impulsado por la Misión de Observadores de las Naciones Unidas en El Salvador (ONUSAL) en varios municipios del país, cuyos gobiernos municipales habían tenido que salir de sus municipios debido al conflicto bélico.
FUNDAMUNI-PROCAP, facilitó la búsqueda de entendimiento entre autoridades municipales y liderazgo local de las comunidades, representados en las CMRDs, para que se pusieran de acuerdo en las prioridades para la reconstrucción y el desarrollo de sus territorios; mediante la capacitación con metodologías participativas, principalmente, en temas de transformación de conflictos, desarrollo local y asuntos municipales. A finales de 1995 trabajaba con 27 municipios en los departamentos de Chalatenango y Morazán.
Su principal actividad una vez generadas las condiciones necesarias para que en cada municipio se trabajara de forma participativa e incluyente, y de haber facilitado la definición de prioridades locales de manera concertada, fue brindar apoyo técnico para la formulación, gestión y ejecución de proyectos para la recuperación de infraestructura básica dañada por el conflicto armado, de acuerdo con las necesidades y prioridades planteadas por las comunidades de cada municipio.
Además, en 8 municipios de estos departamentos se inició un trabajo con niños, niñas y adolescentes para apoyar su desarrollo integral mediante el impulso de escuelas deportivas y de formación integral.
Con base en la experiencia de estos años FUNDAMUNI diseñó y organizó una estrategia para que los municipios impulsaran sus procesos de desarrollo local con participación de la población, concertando planes de acción y luego planes estratégicos que les permitiera trazar una proyección más allá del corto plazo, la estrategia y la forma de planificar se fue afinando sobre la marcha de estos procesos en los territorios.
En 1996, además de mantener el trabajo en los ejes desarrollados durante los primeros años, FUNDAMUNI se concentró en impulsar una nueva institucionalidad local, que se mantuviera impulsando el proceso a pesar de los cambios de administración municipal cada 3 años, con esta concepción promovió y facilitó la constitución de mecanismos permanentes de participación y puso énfasis en fortalecer las capacidades del liderazgo local para participar en la toma de decisiones y en la conducción de su proceso.
Se planteó estos mecanismos permanentes de participación (Comités de Desarrollo del Municipio, Comités de Desarrollo Local, etc.) como instancias amplias, plurales, integradas por el liderazgo representativo de localidades y sectores del municipio, que trabajan junto con el gobierno municipal en impulsar el plan y el proceso de desarrollo de su territorio.
En el segundo semestre de 1999 en el marco de un proyecto de desarrollo y la gestión del agua se empezó a trabajar en Usulután, el segundo departamento del país que fue más afectado por los terremotos del 2001, hecho que produjo un incremento en sus índices de pobreza, característica de los municipios con los que preferentemente trabajaba FUNDAMUNI en Chalatenango y Morazán.
En estos años, se impulsó la formación de microrregiones en Chalatenango y Morazán mediante la colaboración entre municipios cercanos. Se emplearon métodos participativos y mecanismos de participación para coordinar acciones y aunar esfuerzos concertados para impulsar el desarrollo en un ámbito territorial mayor. Este esfuerzo local resultó en la creación de dos microregiones y una coordinación intermunicipal: la MicroRegión Oriente de Chalatenango, la Microregión Nor-Oriental de Morazán, la Microregión y la Coordinación Intermunicipal en Usulután. Además, se apoyó la formación y consolidación de la Microregión Cabañas – San Miguel (MICASAM) como parte del programa Binacional en zonas fronterizas.
Durante el periodo 2000-2013, FUNDAMUNI trabajó para institucionalizar los procesos de desarrollo local, lo que permitió la continuidad de los mecanismos de participación. También se enfocó en fortalecer la asociatividad municipal y promover la conexión entre microrregiones vecinas, sentando las bases para la futura articulación y formación de regiones. Estos esfuerzos se tradujeron en una mayor cobertura geográfica en los departamentos de Chalatenango, Morazán, Usulután, Cabañas y San Miguel.
En el periodo 2019 -2020 se realiza un esfuerzo por desarrollar competencias a los directivos, gerentes y técnicos de 20 asociaciones de municipios del país, que les permita mejorar la toma de decisiones estratégicas, la capacidad de coordinación interinstitucional e incidencia en la definición de la agenda de desarrollo territorial, su portafolio de servicios públicos mancomunados y la innovación en los mismos.
Así mismo, se fue incursionando en el tema de transparencia y contraloría social, como una necesidad por complementar el trabajo que se impulsaba con los municipios, microrregiones y otras instancias de participación para cerrar el ciclo de la inversión en los territorios. En el 2017-2018, se impulsó el fortalecimiento de instancias participativas plurales en 15 municipios del país para ejercer contraloría ciudadana a entidades públicas nacionales y apoyarles en el uso efectivo y transparente de los recursos.
En esta misma línea, en el año 2022, se desarrolla la iniciativa: “Incremento de las competencias de mujeres que participan en OSC de la zona oriental de país, a través de la formación para ejercer su derecho al acceso a la información y realización de ejercicios de contraloría social ante instancias públicas”. Este consistió básicamente en implementar un programa de capacitación en participación democrática, acceso a la información y contraloría social dirigido a mujeres de los cuatro departamentos del oriente del país, que contribuyera al fortalecimiento de sus capacidades y empoderamiento mediante el desarrollo de ejercicios de contraloría social y rendición de cuentas.
Importante fue también, desde los primeros años de FUNDAMUNI, impulsar un trabajo de formación integral con niñez, adolescencia y juventud en municipios de Chalatenango y Morazán, generando actividades para aprovechar su tiempo libre y desarrollo como personas. Desde el año 2013 se amplió el trabajo con jóvenes en función de la prevención de la violencia en los municipios más afectados por ésta, con características urbanas y no solo rurales. Este trabajo se profundizó con planes de prevención y se desarrolló en comunidades de municipios con elevados índices de violencia.
Un logro importante del trabajo en prevención de la violencia fue el proceso de coordinación y articulación de esfuerzos a nivel local mediante la gestión con los Gobiernos Municipales y los Comités Municipales de Prevención de la Violencia, con quienes se trabajó para generar condiciones de sostenibilidad a los esfuerzos, una vez finalizada la intervención. Así mismo, se lideró la conformación de la Red de Comités Municipales de Prevención de la Violencia, la cual surgió con el objetivo de articular esfuerzos intermunicipales, a fin de fortalecer sus capacidades, intercambiar experiencias y generar incidencia desde lo local hacia lo nacional.
A partir del 2022, FUNDAMUNI desarrolla actividades que buscan abordar las causas fundamentales de la migración irregular e incrementar la resiliencia comunitaria e institucional, de los municipios de Apopa y Mejicanos, entre las cuales se destacan Festivales Comunitarios, Promoción y Fortalecimiento de Comités Comunitarios, mejora de espacios públicos que faciliten las actividades de dinamización socio-económica.
De manera similar, otro enfoque que FUNDAMUNI comenzó a impulsar en 1998 fue el apoyo a las familias de los municipios donde operaba, con el objetivo de mejorar sus condiciones económicas y revitalizar las economías locales. Inicialmente, se establecieron Unidades Productivas Demostrativas; luego, en 1999, esta iniciativa se expandió territorialmente y se enfocó en el desarrollo agropecuario en hogares rurales, siguiendo una estrategia de sostenibilidad social y ambiental a través de la capacitación de talentos rurales.
Este compromiso ha perdurado a lo largo del tiempo, y en la actualidad, se están implementando proyectos que buscan fortalecer las capacidades de los productores rurales y las organizaciones locales. El objetivo es promover y ejecutar prácticas agropecuarias sostenibles que conduzcan a una producción de alimentos más saludable, en colaboración con familias en situaciones de vulnerabilidad.